martes, 18 de octubre de 2011

Cinco meses para cambiar el mundo (TExto expositivo-argumentativo para que practiquemos el comentario)

Un fantasma recorre Europa, el mundo, y nosotros lo llamamos 15-M. En cinco meses, desde el 15 de mayo al 15 de octubre, ni ha cambiado el planeta ni ha cambiado España, pero tampoco nadie es el mismo de antes. Los científicos han detectado sobre la superficie terrestre unas extrañas manchas de esperanza.
Nietos del mejor mayo del 68, hijos de la revolución de los claveles, hermanos de muchas de las primaveras árabes, ya hay una democracia real en las calles: la de aquellos que la exigen mientras los vizcondes de turno les llaman perroflautas. Los indignados se hicieron fuertes desde la Plaza del Sol en Madrid al viejo edificio del Valcárcel recobrado en Cádiz, de Jerusalem a Wall Street, de la plaza Tahrir de El Cairo a la Bolsa de Barcelona. Quizá discrepen sobre qué desean, pero tienen claro qué es lo que no quieren: un sistema que permite que el capital social de la empresa de Steve Jobs equivalga a la cuantía de la deuda griega.
Con distintas palabras, ese es el mensaje que sonó el sábado por las calles de la globalización. Es probable que el virus de la recesión no afecte igual a un chocolatero belga que a ese marroquí de Safi, muerto cuando los antidisturbios insistieron en proteger a los ladrones y endiñarle a sus víctimas. El virus económico que aqueja a nuestra deuda y a la de Lationamérica es el mismo, pero sus defensas son diferentes. Los anticuerpos de EE.UU o de la Unión Europea no pueden compararse con el de uno de esos niños con ojos panorámicos y huesos minúsculos que aguarda en Somalia a que la caridad o la justicia dejen de ser un burdo rumor.
Quizá hayan leído a aquel Federico García Lorca que, tras el crack del 29, describía a los seres humanos como “encadenados por un sistema económico cruel al que pronto habrá que cortar el cuello, y sordos por sobra de disciplina y falta de la imprescindible dosis de locura”. Su presagio no se cumplió, ni entonces ni ahora, pero a ver quien es el guapo que corrige semejante diagnóstico. Esto no ha cambiado pero nos estremece. Nos conmueve. Los inmóviles, sin embargo, aún abarrotan los balcones.

Juan José Téllez (Público.es)

Una joven de 14 años, expulsada de un examen por llevar 'hiyab' (a propósito del texto que estamos estudiando)

Una joven de 14 años fue expulsada hace unos días de un examen y, en ese momento también del instituto público en el que estudia en la Comunidad de Madrid, por su negativa a quitarse el hiyab (velo islámico), que ha decidido llevar desde hace unos meses por su propia voluntad. La alumna sigue asistiendo ahora a clase con el velo a la espera de que el claustro decida si puede continuar estudiando en el instituto, del que no ha trascendido el nombre.La estudiante es española, su padre es de Ceuta y, pese a que su madre no lleva el hiyab, ella lo decidió este verano "sin ser forzada". Cuando acudió al examen, el profesor de la materia le pidió que se lo quitara porque le cubría las orejas y no está permitido, dado el incremento de casos de alumnos que acuden con dispositivos electrónicos para copiar en estas pruebas.
El abogado que lleva su caso explica que no debería haber problema porque a la alumna se le reconoce fácilmente con el velo. En la normativa del centro se prohíbe que se lleve cualquier prenda que dificulte la identificación del alumno. A juicio del abogado, los profesores se tienen que remitir a lo que el Ministerio de Interior ha establecido para la identificación: se puede lleva el hiyab en el DNI siempre que dejen al descubierto los rasgos identificativos (desde nacimiento de pelo hasta el mentón).

Fuente: El País

viernes, 14 de octubre de 2011

Comenzamos a leer Crónica de una muerte anunciada. Cuestión I


“Soy escritor por timidez (…) he tenido que refugiarme en la soledad de la literatura” (García Márquez)



Gabriel García Márquez nació en Aracataca (Colombia), en 1928. Como periodista, contempló muchos graves acontecimientos de la vida hispanoamericana. Paralelamente, desde los años 50 desarrolla su obra narrativa, hasta que la revelación de Cien años de soledad, en 1967, lo sitúa en un puesto de excepción en la novela mundial, lo que confirmará su obra posterior. En 1982 recibe el Premio Nobel.



Crónica de una muerte anunciada, novela corta publicada en 1981, es una
de las obras más conocidas y apreciadas de García Márquez. Relata en forma de
reconstrucción casi periodística el asesinato de Santiago Nasar a manos de los
gemelos Vicario. El suceso inicial que inspiró la novela es el siguiente: el 22 de enero de 1951 se casaban dos jóvenes en el pueblo de Sucre. En su primera noche de bodas el esposo decubre que su mujer no es virgen y, en la madrugada del día siguiente, el burlado marido lleva a su esposa a casa de su suegra y le devuelve a su hija. A las pocas horas del hecho, el hermano de la esposa repudiada, da muerte a un joven, al parecer causante de la deshonra de su hermana. La prensa de Sucre dio noticia puntual del suceso.


García Márquez es la máxima figura del llamado "realismo mágico", que se caracteriza por el empleo de lo mágico, lo onírico y lo fantástico, la experimentación de nuevas técnicas narrativas y la búsqueda de elementos extraordinarios de la realidad cotidiana.
García Márquez, como periodista que es y fascinado por la realidad, intenta trascribirla, aunque él afirma que no lo consigue, según él, no acierta a distinguir dónde termina lo real y empieza lo imaginario. Y es por eso que procura que en sus obras tampoco se distingan: "Tarde o temprano la realidad acaba por darle la razón a la imaginación" -dice.
Crónica de una muerte anunciada puede entenderse como la obra más realista de García Márquez, pues se basa en un hecho histórico acontecido en la tierra natal del escritor, del que tuvo conocimiento cercano. Sin embargo, como ya se ha comentado, en García Márquez, la dialéctica entre mito y realidad ofrece caracteres tan peculiares como sorprendentes, pues el primero surge siempre de la segunda, de manera absolutamente natural, mientras que esa misma realidad, como sucede en este caso, está siempre potenciada por el conjunto de una prosa tan cargada de fascinación que la eleva hasta las fronteras de la leyenda. De manera que asoman a las páginas de esta novela elementos que, a pesar de partir de un hecho real, están descritos con tal mitificación, detalle o exageración que se hacen maravillosos.


A propósito del realismo mágico, aquí tienen la primera cuestión para que opinen y contribuyan, con su sapiencia, en el blog:




1) ¿Qué elementos propios del REALISMO MÁGICO puedes encontrar en el primer capítulo del libro? ¿Crees que el sentido común y la lógica corresponden a la VERDAD o suponen un mero reduccionismo debido a nuestras limitaciones perceptivas?

sábado, 8 de octubre de 2011



Bienvenidos a este refugio virtual, que pretende convertirse en un lugar de encuentro y reflexión compartida para los miembros del maravilloso curso en el que tengo el honor de participar: 2º de Bachillerato A. En primer lugar, lanzo un interrogante enigmático: El nombre de este blog ("Tantas palabras para un mismo desconcierto") se halla entre las páginas de una novela que marcó mi existencia y que considero como una de las grandes obras de la narrativa del siglo XX... Te recomiendo que algún día leas este libro; aunque resulta algo complejo, realmente merece la pena, pues nos muestra que la realidad puede ser contemplada desde numerosas perspectivas, que existe la magia en las cosas más sencillas y que debemos librarnos de las orejeras que nos obligan a caminar en una única dirección. La cordura socialmente establecida no siempre es más sensata que la locura. Buscar, buscar el centro de tu propio corazón (y desde allí, tender un puente hacia el otro lado...)